Energía limpia

Las empresas de Columbia Británica están bien posicionadas para satisfacer los intereses de los inversores debido a sus ventajas competitivas.

Ofrecemos:

• Recursos abundantes: Columbia Británica está acelerando la descarbonización industrial aprovechando uno de sus recursos más fiables en la lucha contra el cambio climático: su suministro de energía hidroeléctrica abundante, limpia y rentable como alternativa a los combustibles fósiles.
• Participación de la comunidad y las Primeras Naciones: Columbia Británica trabaja en asociación con las Primeras Naciones y la industria de energía limpia para lograr acuerdos que garanticen que los beneficios reales lleguen a las personas de la provincia y, al mismo tiempo, protejan nuestro medio ambiente.
• Fácil acceso al mercado: Columbia Británica ocupa la posición regionalmente más ventajosa entre otras provincias de Canadá para acceder a los mercados globales, como Asia, América, Europa y África, donde la demanda de hidrógeno sigue siendo alta.
• Mano de obra altamente cualificada: Columbia Británica cuenta con una fuerza laboral grande, diversa y educada y una sólida reserva de talento gracias a sus programas de educación y capacitación que preparan a trabajadores altamente especializados en el sector de la energía limpia.
• Tecnologías innovadoras: La provincia está acelerando el desarrollo tecnológico para un futuro con bajas emisiones de carbono a través del Centro de Innovación y Energía Limpia y proporcionando fondos para el desarrollo de tecnologías innovadoras en el sector de la energía limpia.
• Gobierno de apoyo: El Gobierno de Columbia Británica prioriza la expansión del sector de energía limpia, fomentando activamente la inversión y esforzándose por generar oportunidades de mercado para la provincia.
• Liderazgo Ambiental Sostenible: La Hoja de Ruta de CleanBC para 2030 describe el plan de la Provincia para reducir las emisiones en un 40% para 2030, e incluye una serie de acciones aceleradas y ampliadas en ocho vías, que incluyen energía baja en carbono, transporte, edificios, comunidades, industria, bioeconomía forestal, agricultura, acuicultura y pesca, y tecnologías de emisiones negativas.